Historia con el tercer vuelo de prueba de Starship
SpaceX hace historia con el tercer vuelo de prueba de Starship, alcanzando velocidad orbital por primera vez. Aunque el aterrizaje no fue exitoso, el vuelo marca un avance crucial en la exploración espacial y el desarrollo de naves reutilizables.

En un hito trascendental para la exploración espacial, SpaceX ha marcado un momento histórico con su mega-cohete Starship. El tercer vuelo de prueba del colosal cohete, que se llevó a cabo desde el sur de Texas la semana pasada, ha alcanzado la velocidad orbital por primera vez. Este acontecimiento sin precedentes fue seguido de cerca por una multitud diversa que se congregó en las costas de South Padre Island, desde vacacionistas de primavera hasta entusiastas de la exploración espacial y fieles seguidores de SpaceX.
El lanzamiento, que tuvo lugar a las 9:25 am EDT desde las instalaciones de SpaceX cerca de Boca Chica Beach, fue un espectáculo impresionante que dejó a muchos boquiabiertos. Aunque tanto el Starship como su propulsor, Super Heavy, no lograron un aterrizaje exitoso, el vuelo cumplió con una serie de objetivos cruciales, marcando un progreso significativo en su desarrollo.
La misión, denominada Prueba de Vuelo Integrada-3 (IFT-3), representa el tercer intento de prueba para el Starship completamente apilado. A pesar de algunos contratiempos en los intentos anteriores, este vuelo proporcionó datos valiosos que permitieron a los ingenieros de SpaceX realizar ajustes críticos para futuros éxitos.
Una de las mejoras más destacadas fue la implementación de la técnica de "puesta en marcha en caliente", que demostró ser exitosa durante el vuelo. Esta estrategia permitió que los motores de la etapa superior se encendieran antes de la separación completa del propulsor Super Heavy.
Aunque en este vuelo no se intentó alcanzar una órbita completa, la fase suborbital fue esencial para demostrar capacidades importantes, como el reencendido de motores y la transferencia de combustible criogénico. Sin embargo, se perdió contacto con la nave durante el reingreso.
A pesar de los desafíos encontrados, este vuelo representa un avance significativo hacia el objetivo de SpaceX de desarrollar una nave espacial completamente reutilizable. Este logro es crucial para futuras misiones, como la misión Artemis 3 de la NASA, que busca llevar humanos a la Luna por primera vez desde la era Apolo.